martes, 10 de diciembre de 2013

Llega a mí.

Llega a mí
para hacer temblar mi mundo,
para llenarme
y hacerme olvidar
que no hay más huida
que la que acaba
cuando mis labios te rozan,
y en el infierno de tu carne,
sin poder evitarlo,
me fundo.

2 comentarios:

  1. Los deseos apasionados, cuando la vivencia es egoismo
    y la conviencia social ruin
    no evitarán ellos la deriva al fatalismo...
    Aunque lo más probable,
    que las ansiadas soluciones a los desencuentros sociales
    animen finalmente las penurias individuales
    y cada cual encuentre que puede fácilmente llegar al otro
    y hacer temblar su mundo, para llenarle y hacerle olvidar...

    [Me gusta como escribes. Yo no sirvo pero quise comentar con tu sistema :))]

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  2. Dices que no sirves??? Me encanta como lo dices y lo que dices. Al fin y al cabo escribir, imaginar, recordar momentos aunque no hayan sucedido es lo que nos salvará del resto de naufragios.
    Gracias y un beso. Hermoso comentario. ;-)))

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