viernes, 20 de septiembre de 2013

Me dejaron tus manos.


 
Me dejaron tus manos,
y el miedo de morir de frío
pudo más
que el dolor del abandono.

Me desnudé de tu paisaje,
me convertí en otro lienzo,
pero no reinó de nuevo
ninguna luz cálida en mi desierto.

Abrí mi cuerpo sereno
al color de otros pinceles,
otras bocas,
otras lenguas
se plasmaron en la noche
y en cada una de mis pieles.

Ya no encuentro palabras
ni te deshago en mis versos,
trazo mi agonía sin colores,
mientras tu amanecer
se escurre, poco a poco,
entre mis dedos.
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario