Océano,
crecida de silencios,
tormenta de placer,
temporal en mar abierto.
Olas que mecen,
que abaten,
que estremecen,
que naciendo en tu boca
y muriendo entre mis piernas,
desatan furia,
inundan el alma,
y me hacen subir al cielo
sin abandonar mi lecho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario