Me recreo un instante
en ese no tener tu cuerpo.
Deshago sueños,
y en mis manos los moldeo,
para saciar la sed de tu ausencia.
Recuerdo caricias,
respiro silencios,
y enveneno recuerdos
en este juego solitario
que me lleva a morir en ti
y en el que siempre pierdo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario